Productividad y satisfacción de los empleados, en manos de la inteligencia artificial
Las interfaces de usuario impulsadas por IA llevarán a interacciones cada vez más profundas y más significativas para la operatividad de las empresas en la nueva década de la disrupción digital.
Nos encontramos en una nueva década de disrupción digital impulsada por la inteligencia artificial (IA) y la automatización, que están creando nuevas formas en que las compañías interactúan y atienden a sus clientes y empleados.
En este contexto, las organizaciones serán capaces de permitir a sus empleados alcanzar mayores y mejores resultados mediante acciones más inteligentes.
Un estudio llevado a cabo por Avanade, proveedor de servicios digitales y en la nube, ha puesto de manifiesto que la primera era de IA traerá nuevas oportunidades para las organizaciones, similares a la revolución de los PC de la década de los 90, pero las empresas deben abordar ahora su transformación.
“La IA no solo está reinventando las experiencias del cliente digital, sino que también va a ser el recurso tecnológico más importante para los empleados de una organización”, ha manifestado Chris Miller, director de Innovación Tecnológica de Avanade.
A medida que la nube, el Big Data y el móvil continúan convergiendo, el estudio prevé que las interfaces de usuario impulsadas por la inteligencia artificial llevarán a interacciones cada vez más profundas y más significativas, adaptándose no solo a cada cliente o empleado sino a su situación única y específica.
El informe ‘Avanade Technology Vision 2017’ ha señalado cinco acciones que las empresas ya pueden llevar a cabo para sobrevivir y prosperar en la primera era de la IA: adoptar la IA como una nueva experiencia, aumentar las capacidades de sus trabajadores, integrarse en la economía de las plataformas, en todo momento tomar un enfoque DesignOps, actuar con responsabilidad y planificar enfrentarse a consecuencias colaterales.
Para ello, las organizaciones deben desarrollar un marco de ética digital que aborde cuestiones como la seguridad de los datos, la confianza o la privacidad y que proporcione directrices sobre cómo se debe obtener y utilizar la información.