España tiene mucho por hacer para su transformación digital
España, la economía número 14 del mundo, ocupe el lugar 35 en digitalización y se precisa un cambio cultural y una renovación completa de nuestra forma de trabajar y relacionarnos para adaptarnos a esta transformación digital.
Ametic o ha presentado su informe de ‘Transformación digital; Visión y Propuesta de AMETIC” donde expone la perspectiva del sector sobre la necesidad y conveniencia de progresar aceleradamente en la transformación digital española en tres ámbitos: las empresas, la Administración Pública y los ciudadanos”para la mejora de la competitividad española en un mundo globalizado.
El informe señala y lamenta que España, la economía número 14 del mundo, ocupe el lugar 35 en digitalización (el 43 si atendemos exclusivamente al nivel de digitalización de sus empresas) según el NRI 2016 (Network Readiness Index del World Economic Forum). Además, destaca negativamente en cuanto a formación tecnológica de sus empleados. Algo parecido nos ocurre en el ámbito europeo, donde nuestro nivel de digitalización aparece en el puesto 15 de los 28 países de la Unión Europea según el DESI (Digital Economy and Society Index), incluso un poco por debajo de la media de la UE.
“La transformación digital, más allá de limitarse a incorporar las nuevas tecnologías a los procesos de organizaciones y personas, supone un cambio cultural y una renovación completa de nuestra forma de trabajar y relacionarnos para adaptarnos a esta revolución”, dice el documento que continúa explicando que ”para poder alcanzarlo, se hace necesario concienciar a los gobiernos, las administraciones, los sectores productivos y el público en general de que debemos realizar un gran esfuerzo de mejora, sobre todo si tenemos en cuenta que desarrollar una verdadera economía digital será la base que permita garantizar nuestra competitividad y nuestro bienestar en un futuro próximo”.
En este contexto, el documento de AMETIC repasa aspectos clave para la transformación digital como el marco regulatorio, la completa renovación de la estrategia y el liderazgo de una compañía, que deben orientarse totalmente a lo digital, así como la adopción de prácticas colaborativas o la captación, formación y retención del talento digital, considerados esenciales para el éxito de esta iniciativa.
Dice un comunicado de prensa que las tecnologías y su incorporación no son en sí mismo el objetivo final de la transformación digital, sino que deben ser consideradas como facilitadoras para llevar a cabo el proceso. Así, se identifican la conectividad, la computación en la nube, la analítica de datos, la automatización y la digitalización del cliente como las principales palancas tecnológicas de la transformación.