ChannelBiz

2015 fue un buen año para Check Point. No sólo realizó algunas adquisiciones importantes, como la de Hyperwise en febrero y la de Lacoon en abril, sino que realizó una serie de lanzamientos destacados, como la tecnología Threat Extraction, Check Point vSEC o SandBlast, por mencionar unos pocos. Y los resultados económicos no han defraudado, ni los anuales ni los correspondientes al cuarto trimestre.

En el último periodo del año Check Point facturó 458 millones de dólares, un 9% más que en el mismo periodo del año anterior, con un crecimiento de los beneficios del 12%.

Curiosamente los crecimientos se repiten cuando hablamos de resultados anuales. De forma que la facturación para todo el año fue de 1.630 millones de dólares, un 9% más que los 1.496 millones de 2014. Y en lo que respecta a los beneficios, el crecimiento fue del 12%.

Gil Shwed, fundador y CEO de Check Point, ha destacado en un comunicado que “los ingresos por suscripción crecieron un 22% en el último trimestre, lo cual se debió principalmente a la demanda de tecnologías de prevención de amenazas avanzadas, entre las que se incluye nuestra solución frente a malware de día cero, SandBlast”.

De cara al futuro más que previsiones, Shwed asegura que el foco de la compañía seguirá centrado en la prevención de ataques, y no sólo en su detección; “En 2016 continuaremos proporcionando soluciones y tecnologías de prevención de amenazas que permitirán a más clientes mantenerse un paso por delante de las amenazas en sus entornos de red, móviles y en la nube”.