Los fabricantes de chips quieren hacer smartphones más baratos
Se calcula que dentro de unos años la mayoría de los smartphones adquiridos serán de gama baja en los mercados emergentes donde se buscan terminales baratos pero con calidad.
De acuerdo con un estudio de ABI Research, para el año 2017 el 42% de los teléfonos inteligentes que se vendan serán de gama baja, por debajo de los 200 dólares, mientras que los smartphones que valen más de 400 dólares supondrán el 23% de las ventas.
Esto es porque los países emergentes se encargarán de la mayoría del consumo de smartphone para dentro de cinco años. En comparación, en 2010, sólo el 14% de los teléfonos inteligentes vendidos eran de bajo coste, según el mismo estudio.
Por ese motivo, los fabricantes de equipamientos para teléfonos inteligentes necesitan encontrar la manera de rebajar sus precios para desarrollar terminales de bajo coste para aprovechar la dinamización de las ventas que está experimentando este sector últimamente, tendencia que continuará en los próximos años, de acuerdo a los datos.
Son sobre todo los fabricantes de chips los que han tomado medidas al respecto últimamente. Así, Intel, Qualcomm y la taiwanesa Media Tek han cerrado acuerdos con vendedores de teléfonos en China y otros países emergentes para aumentar su presencia en el sector. Tradicionalmente, los dispositivos de gama baja utilizan los procesadores más viejos y débiles, lo que supone sacrificar ciertas características y rendimiento de los terminales para poder así bajar el precio.
Sin embargo, publica The Wall Street Journal diversos acuerdos que cambiarían el panorama. Por un lado, Qualcomm se ha unido al fabricante Lenovo y hace un par de semanas lanzaron dos teléfonos inteligentes en China que utilizan chips de doble núcleo de Qualcomm, que normalmente están reservadas a los teléfonos más caros.
Por su parte, Intel, que busca un hueco en el mercado smartphone que aún no ha conseguido conquistar, ha declarado que la compañía considera que los mercados emergentes son clave para el éxito a largo plazo en el mercado de los teléfonos inteligentes.
También a las operadoras de los mercados emergentes les interesa esta iniciativa. Así, por ejemplo, Mobile TeleSystems, uno de los mayores proveedores de telefonía móvil de Rusia, planea trabajar con fabricantes asiáticos como ZTE y Huawei teléfonos que cuesten menos de 100 dólares en el país.
La compañía espera que los dispositivos más baratos impulsen la adopción de los smartphones y se estima que alrededor del 60% de los dispositivos vendidos a través de Mobile TeleSystems sean smartphones en 2014, frente al cerca del 15% registrado en el primer trimestre de este año.