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Los resultados de Microsoft para el tercer trimestre han sido mejores de lo esperado. La compañía ha conseguido un millón de suscriptores a Office 365, se ha beneficiado del fin de Windows XP, ha montado su unidad empresarial y ha mejorado su oferta cloud. En cuanto a Surface, los ingresos se han incrementado un 50% en el trimestre en comparación con los de hace un año, hasta los 500 millones de dólares.

Durante el tercer trimestre Microsoft facturó 20.400 millones de dólares, lo que arrojó un beneficio neto de 6.970 millones de dólares, o 68 centavos por acción. Las previsiones de los analistas situaban los ingresos en 20.390 millones de dólares y los beneficios en los 63 centavos por acción.

Se esperaban con interés los datos de este trimestre por ser los primeros que se lanzaban tras el nombramiento de Satya Nadella como responsable de la compañía. También porque se trata del último trimestre antes de que las cuentas de Nokia se contabilicen aparte.

Por unidades de negocio, la división Enterprise de Microsoft ha generado ingresos por valor de 10.320 millones de dólares, algo más que los 9.980 millones que facturó hace un año.

Los ingresos generados por los productos de servidores creció un 10%, las ventas de SQL se incrementaron un 15% y los ingresos por licencias de Windows un 11% respecto a los datos del mismo periodo del año anterior.

Durante la presentación de resultados Microsoft aseguró que el 90% de los desktops empresariales ya utilizan Windows 7 o Windows 8.

En cuanto a los ingresos generados por sus servicios cloud, concretamente Azure y Office 365, las ventas en el tercer trimestre alcanzaron los 1.900 millones de dólares, un 31% más que hace un año.