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Se espera que los 9.000 millones de equipos conectados que existen en la actualidad, pasen a ser de más del doble llegando a 20.000 millones en 2020 y que, dentro de esta cifra, los equipos móviles que están conectados pasen de los 6.000 millones actuals a los 12.000 millones dentro de 9 años. Por equipos móviles conectados se refiere a aquellos que “incluyen actualmente o probablemente incluirán tecnología SIM y por lo tanto estarán conectados por redes móviles de área amplia”.

Estas son las conclusiones obtenidas en un estudio realizado por la GSMA (Asociación GSM) con el apoyo de AT&T, Deutsche Bank, KT, Telenor Connexion y Vodafone, y en asociación con Machina Research, que añade que este crecimiento de la “vida conectada”, como ellos lo denominan, supondrá una oportunidad de ingresos para operadores móviles de casi 1.200 millones de dólares (882 millones de euros), una cantidad siete veces mayor que los ingresos esperados en 2011.

Según el informe, “los operadores móviles pueden beneficiarse de esta importante oportunidad de ingresos atendiendo áreas claves de la cadena de valor como la entrega de servicio y la integración de sistemas, así como una colaboración más estrecha con sectores verticales para ofrecer nuevos y atractivos servicios a sus clientes”.

Los sectores que más se beneficiarán de este crecimiento serán la industria de los productos electrónicos de consumo, que podría generar ingresos de 445.000 millones de dólares, el sector del automóvil, el sector de la salud y el sector de los servicios públicos.

Matthew Bloxham, director de investigación de empresas de telecomunicaciones en Deutsche Bank, declaró respecto a este estudio que “el crecimiento de equipos conectados tiene el potencial de ofrecer sustanciales beneficios sociales, ecológicos y financieros a la economía mundial“, además de que estas cifras “subrayan la importante oportunidad de ingresos que este espacio podría proporcionar”.