Una de las compañías afectadas por el terremoto y el posterior tsunami de Japón ha sido Fujitsu, que ha visto como seis de sus fábricas ubicadas en el país nipón han sufrido daños.
Para garantizar la continuidad de las operaciones comerciales la región CEMEA & I (Europa Occidental, Oriente Medio, África e India), la firma ha decidido aumentar la producción de su fábrica de Augsburgo (Alemania), que ya está trabajando con Japón para garantizar un suministro continuo. Todos los ordenadores de sobremesa y los servidores x86, así como algunas líneas de notebooks ya se están fabricando en dicha fábrica.
Asimismo, Fujitsu busca proveedores alternativos para los componentes necesarios para la producción y transferirá temporalmente la producción de PC a la fábrica de Shimane, que no resultó afectada.
Tal y como señala la compañía en un comunicado, “Fujitsu ha mitigado las consecuencias económicas del desastre a través de la estructura global y descentralizada de la compañía”.
Ahora, la prioridad de la firma es “apoyar a los compañeros de Japón”, apunta Rolf Schwirz, consejero delegado de Fujitsu Technology Solutions. “Y la mejor manera de darles soporte es a través de la contribución al éxito de nuestro negocio global”, añade.
La compañía ha publicado los resultados correspondientes al primer trimestre de su ejercicio 2024.
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