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En los últimos años, los teléfonos móviles han evolucionado desde un simple terminal para hacer llamadas a auténticos ordenadores personales, los cuales se han convertido también en víctimas potenciales de ataques.

“La principal vía de infección del equipo suele ser siempre el propio usuario, bien por mostrarse confiado o bien por desconocimiento, de forma que es clave que sea consciente de que su teléfono puede ser vía de infección para otros equipos y también objetivo de los cibercriminales, dado el creciente uso que hacemos de estos aparatos para realizar cada vez más actividades online”, asegura Fernando de la Cuadra, director de Educación de Ontinet.com, distribuidor exclusivo de Eset en España.

Por ello, Eset ha elaborado un decálogo de hábitos básicos de seguridad para mantener los datos que almacenan y transmiten los móviles protegidos.

Las recomendaciones del fabricante de seguridad son las siguientes:

– Activar el acceso al dispositivo mediante PIN.

– Realizar una copia de seguridad de los datos del terminal.

– Activar las conexiones por bluetooth, infrarrojos y WiFi sólo cuando se vayan a utilizar.

– Asegurarse siempre de que los equipos a los que se conecta están limpios.

– No insertar tarjetas de memoria sin haber comprobado antes que están libres de ficheros infectados.

– Descargar sólo aplicaciones de sitios de confianza o de las tiendas oficiales.

– No acceder a los enlaces facilitados a través de mensajes SMS/MMS no solicitados.

– Desconectarse siempre de los servicios web que requieran contraseña.

– Instalar un software antivirus.

– Conocer y apuntar el número IMEI (International Mobile Equipment Identity, Identidad Internacional de Equipo Móvil) de su teléfono.