Cómo vender virtualización
El mercado de la virtualización, más caliente que nunca
Está claro que tras varios ejercicios en los que el mercado se ha estado preparando para migrar hacia infraestructuras intangibles, 2009 es, por fin, el año de la virtualización. Al menos así se pudo comprobar en la pasada edición de VMworld Europe, que congregó a 4.600 profesionales de EMEA, entre ellos 1.500 partners de canal y 100 expositores, para debatir en torno a las nuevas posibilidades de lo que ya ha dejado de ser una tendencia para convertirse en una realidad.
Y por si quedaba alguna duda, cada día somos testigos de algún anuncio que nos recuerda que esta tecnología seguirá dando que hablar durante los próximos meses. Por ejemplo, el lanzamiento de la plataforma UCS de Cisco para la gestión unificada de los centros de datos ha reavivado el ya de por sí ardiente mercado de la virtualización. No en vano, el futuro de esta oferta, basada en un bastidor para servidores blade, depende en gran medida de las propuestas de software desarrolladas para aprovechar al máximo el hardware empresarial a través de la multiplicación de las infraestructuras en recursos intangibles. Y en este contexto es donde entran en juego las aplicaciones de VMware y Microsoft, ambos socios de Cisco.
En principio, UCS está desarrollada para entornos de grandes corporaciones. Pero lo cierto es que la virtualización entiende cada vez menos de tamaños puesto que se trata de una tecnología que ya está pegando fuerte en la pyme desde que se optimizó para la consolidación de servidores x86, los basados en las populares arquitecturas de AMD e Intel. Incluso para una pequeña empresa, la virtualización ya es rentable desde el punto de vista del retorno de la inversión y del coste total de propiedad.
Y en un entorno económico en el que las compañías se piensan cada vez más sus gastos en TI, Citrix acaba de facilitar aún más las cosas a los más pequeños poniendo a su disposición, de forma gratuita, su aplicación para la virtualización de servidores: XenServer.
Cinco maneras de reducir costes con recursos virtuales
Si aun así el canal no encuentra argumentos de venta para impulsar la apuesta por este tipo de proyectos, a continuación desgranamos cinco modos en los que esta tecnología puede ayudar a ahorrar dinero a los clientes, sobre todo en la coyuntura económica que atravesamos.
1. Menos hardware
Es muy simple: la consolidación de servidores y almacenamiento a través de la virtualización significa que ya no será necesario comprar un gran número de servidores o de dispositivos de almacenamiento. Y un número menor de piezas de hardware también se traduce en menos periféricos, cables e infraestructuras de conectividad.
Además, la virtualización del escritorio reduce la frecuencia con la que hay que renovar el parque de PC porque se utilizan económicos thin clients en vez de completas configuraciones de equipos de sobremesa o portátiles.
2. Adiós a los recursos físicos
Cuanta menos infraestructura física exista, habrá menores costes de mantenimiento asociados. Y eso significa recortar notablemente los gastos de hospedaje del centro de datos e incluso eliminar aquella partida destinada a los grandes repositorios de datos.
3. Olvídese del termostato
Un número menor de servidores y de dispositivos de almacenamiento genera mucho menos calor, lo que reduce automáticamente el coste de la refrigeración en los centros de datos.
4. Baje la potencia eléctrica
Con menores necesidades de refrigeración se reduce la dependencia de la red eléctrica, así que ya no será necesario contratar una alta potencia para hacer funcionar las infraestructuras corporativas.
5. Eficiencia y productividad
Al final, todo se resume en eficiencia. Si la virtualización sobrepasa las limitaciones del hardware, las compañías pueden poner en marcha de forma más rápida nuevos programas y aplicaciones. Esto también reduce el tiempo de inactividad para el mantenimiento del sistema, lo que aumenta la productividad de los trabajadores.