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Hace ya unos meses trascendieron las investigaciones que tanto Mastercard como Visa estaban realizando en torno a la biometría como sistema de autenticación para garantizar un pago seguro. Ambas empresas creen que las contraseñas, esas cadenas de caracteres que todo ciberdelincuente persigue, y que se utilizan para confirmar nuestra identidad, se quedan obsoletas.

Tanto MasterdCard SecureCode como Verified by Visa, ambos basados en el protocolo 3D Secure para reducir el fraude de las transacciones online, fuerza a los usuarios a introducir una contraseña. El protocolo también ha sido adoptado por los retailers de todo el mundo con el fin de garantizar los pagos.

El pasado mes de noviembre empezaba a hablarse de 3D Secure 2.0, que busca reducir la dependencia de las contraseñas como método para verificar la identidad; de forma que en caso de que sea necesaria una autenticación, se usa la biometría: huellas dactilares, reconocimiento facial, ritmo cardiaco mapa de las venas de la mano, etc. Ya se dijo en su momento que el protocolo 3D Secure 2.0 podría empezar a adoptarse en 2015 y que poco a poco iría reemplazando el antiguo.

Trasciende ahora, a través de CNNMoney, que los usuarios de Mastercard podrán verificar sus compras poniendo como aval su cara o dedo; es decir gracias a las tecnologías de reconocimiento facial e identificación de huella dactilar. Y eso empezará a ociurrir el próximo otoño

Para poder utilizar la nueva tecnología los usuarios tendrán que descargar la app de MasterCard en sus teléfonos, de forma que cuando vayan a realizar un pago, tendrán que demostrar su identidad bien poniendo el dedo sobre la pantalla o mediante un selfie. Según parece Mastercard no almacenará ninguna imagen o huella, sino que será capaz de reconstruirla con la información que almacena; también se apunta a que mediante un selfie y los naturales parpadeos y leves movimientos de la cara la compañía se asegura de que el sistema no se burla poniendo simplemente una fotografía frente a la cámara.

De forma que en unos pocos meses un programa piloto permitirá que unos 500 clientes empiecen a utilizar la nueva tecnología de la compañía, para lo que ha tenido que asociarse con algunos fabricantes de terminales y sistemas operativos, como Apple, Blackberry, Google, Microsoft y Samsung. MasterCard, además, está finalizando sendos acuerdos con dos grandes bancos.