ChannelBiz

Microsoft ha anunciado la retirada del soporte técnico a sus usuarios de Windows 7 y, desde el día de hoy, no le añadirá nuevas características, con el objetivo de que los usuarios se cambien al Windows 8.1, en un momento en que quedan pocos meses para que aparezcan la nueva versión de este sistema operativo.

Esta medida supone que aunque los equipos basados en Windows 7 seguirán funcionando con normalidad, si surge algún tipo de problema técnico, la  empresa con sede en Redmond no será quien lo repare y el usuario deberá pagar por encontrar una solución de la mano de algún técnico.

Esta versión del SO de Microsoft ha cumplido cinco años y ha sido el más adoptado de la historia de este software, como sustituto de Vista, una versión que presentó muchos problemas y  no recibió una gran acogida del usuario. Destaca que, el Windows 8, el sistema operativo lanzado después, también tuvo malas críticas, lo que hizo que muchos usuarios prefirieran no emigrar sus equipos.

Parece que el soporte a Windows 7 llega muy pronto, pero es el ciclo de vida que generalmente la empresa creada por Bill Gates da a sus sistemas operativos. Si alargó la asistencia a XP fue porque muchas personas lo tenían instalado en sus equipos. Para 2020 se planea que será la despedida definitiva a Windows 7, por parte de la firma fabricante, al igual que ha sucedido con el XP lanzado al mercado en el año 2001.

Según los últimos estudios del mercado, la mayoría de usuarios (algo más del 50%) sigue usando equipos basados en Windows 7 y Microsoft busca que los clientes acaben migrando sus ordenadores y portátiles al Windows 10 que llegará este año al mercado.

Aquí una fotogalería preparada por ChannelBiz con las novedades que traerá el Windows 10.