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Tras mostrar los resultados fiscales correspondientes al cuarto trimestre del año,  y al conjunto del año fiscal 2014, que no han sido muy positivos, los representantes de la firma comentaron a sus accionistas su intención de crear procesadores para instalar en servidores y centros de datos, mercados de gran crecimiento, y competir con los chips Titan de Intel.

Para que esto sea posible, la empresa ha explicado a sus inversores que está trabajando en el desarrollo de chips de baja potencia ncesarios para los centros de datos, lo que permitirá su entrada en el mercado de servidores.

Según han explicado los portavoces de Qualcomm, entre sus previsiones reside la idea es que en los próximos años, casi todo tipo de dispositivo móvil se conectará a la nube y a Internet, lo que proliferará el número de dispositivos que necesiten sus procesadores.

Sus resultados muestran una cierta caída y parece ser que se han visto afectados por lo problemas que la empresa está teniendo para crecer en China, un mercado donde está siendo investigado por las autoridades de la competencia, en temas de antimonopolio, y donde tiene gran competencia con empresas locales capaces de crear chips de bajo coste para teléfonos de las mismas características.

Otro de los sectores en el que Qualcomm quiere llegar a destacar es en el de las redes 5G, las de futura generación y, para ello, acaba de probar la tecnología LTE Advanced de Categoría 10 que ofrece velocidades de descarga de hasta 450 Mbps, acercándose así a las redes de quinta generación.

Tal y como publica Reuters, los ingresos totales de Qualcomm crecieron un 6,5% en el año fiscal 2014, muy por debajo de las tasas de crecimiento de alrededor del 30% en los últimos años, lo que ha decepcionado al mercado. Los analistas esperan un crecimiento del 5% para 2015.