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Desde el hallazgo en 1992 de sus yacimientos petrolíferos, Guinea Ecuatorial se ha convertido en un paraíso para las inversiones extranjeras, sobre todo después del establecimiento del Plan de Nacional de Desarrollo Económico y Social. También llamado “Horizonte 2020”, el plan busca dotar a este pequeño país de infraestructuras que facilitarán a sus ciudadanos de un mayor grado de bienestar, necesario para avanzar en su desarrollo.

Según el Instituto para el Desarrollo Económico y Social Europa-Guinea Ecuatorial, el plan es una oportunidad única para las inversiones españoles y para que las empresas nacionales participen en los contratos que están en licitación.

La construcción de Infraestructuras para la Industria Petrolífera y Gasística; Nuevos Edificios para Educación –básica y universitaria-; Infraestructuras de Transporte Terrestre:  carreteras, aeropuertos;  Plantas Potabilizadoras de agua; Saneamiento y Nueva Red de Hospitales y Asistencia Primaria,  son algunas de las prioridades que este ambicioso proyecto quiere desarrollar hasta el año 2020, y que sin duda, constituyen  una gran oportunidad para las empresas de todo el mundo y que mejorará el nivel de vida de la población y acabará con la pobreza.

Guinea Ecuatorial se ha convertido en la “joya africana” del nuevo milenio y los excepcionales recursos naturales atrajeron más de un tercio de la inversión extranjera en la región, alrededor de 3.700 millones de dólares. Los Estados Unidos son uno de sus principales inversores.

El Instituto Europa-Guinea Ecuatorial tiene como fines promover las relaciones empresariales e institucionales entre  Guinea Ecuatorial y Europa,  facilitando, no sólo el intercambio económico y los flujos de inversiones, sino también el intercambio educativo y profesional  entre empresas e instituciones europeas y ecuatoguineanas que facilite el desarrollo sostenible y la transferencia de tecnología.