Eastman Kodak ha anunciado públicamente que ha pedido de forma voluntaria al Tribunal de Quiebras de Nueva York declararse en bancarrota, con el objetivo de reorganizar su negocio, amparándose en el capítulo 11 de la ley americana que permite a las empresas tomar esta inciativa cuando tienen una situación complicada.
Por su parte, el fabricante de cámaras fotográficas ha hecho pública la solicitud de un crédto solicitado a Citigroup de 950 millones de dólares y que ha de devolverlo en 18 meses.
Según Kodak, este préstamos se utilizará para “aumentar la liquidez y el capital de trabajo”. Los representantes de la empresa creen que con este dinero podrán continuar su negocio bajo el capítulo 11 y pagar los salarios de los empleados.
Los rumores de la mala situación económica del fabricante comenzaron hace más de un año, en septiembre de 2010, pero Kodak no había tomado ninguna medida de forma oficial. Uno de los últimos capítulos protagonizados por la compañía fue hace unos díascuando interpuso una demanda a Apple y HTC por violanción de patentes relacionadas ocn el tratamiento de imágenes.
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Como emprendedor y socio de un ecommerce muy vanguardista de venta de material de oficina y toners me sorprende cuanto cuesta a estas grandes compañías girar y cambiar su rumbo.
En el caso de Kodak es una verdadera pena