Google y Apple se enfrentan a la UE por evasión de impuestos

Negocios

La Unión Europea quiere evitar que las empresas multinacionales se beneficien de ventajas fiscales, que van contra la normativa de impuestos europea.

Google y Apple, además de Ikea y McDonalds deberán  enfrentarse mañana miércoles a legisladores de la Unión Europea a dar explicaciones sobre las ofertas fiscales de las que se están aprovechando para pagar menos impuestos en el territorio común.

Bruselas está incrementando el control sobre las multinacionales, que tienden a cobijarse en aquellos países donde el pago de tastas es más reducido y no en el país donde realizan sus actividades. Hace ya un tiempo, la Comisión Europea dijo temer que Irlanda “proporcione ventajas selectivas” a Apple, teniendo en cuenta sus ventajas, algo que iría contra la normativa de la UE, como publicó ChannelBiz.

La audiencia, organizada por el comité de impuestos del Parlamento Europeo, sigue a un evento similar que tuvo lugar en noviembre del año pasado, cuando Anheuser-Busch InBev, el banco HSBC, Google y otras ocho compañías fueron interrogadas sobre el mismo tema.

La Comisión Europea también está investigando varios casos para ver si se infringen las normas sobre ayudas estatales que prohíben que algunos países del territorio común puedan contar con algunas ventajas fiscales, puesto que esta práctica perjudicaría a otros países de la región.

Starbucks, por su parte, se ha negado a participar en este encuentro, tras desafiar una orden de la Comisión Europea a las autoridades holandesas que les insta a recuperar hasta 30 millones de euros en impuestos atrasados, dijo que el Parlamento Europeo en un comunicado. La marca de automóviles Fiat Chrysler, que ha apelado contra la investigación de la UE contra su acuerdo fiscal con Luxemburgo, también ha rechazado la invitación.

El jefe de Inter IKEA Group, Soren Hansen, discutirá sobre las ventajas de la firma minorista. Y es que el partido de los Verdes del Parlamento europeo, acusó el mes pasado a IKEA de evitar el pago de cerca de 1 millón de euros en impuestos entre los años 2009 y 2014, ya que canaliza los ingresos por regalías a través de una empresa holandesa y posiblemente a través de Luxemburgo y Liechtenstein.

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